#17. Las redes nos dan... ¿más trabajo?
Quizá haya que estar en redes, pero el cómo es un gran campo de batalla.
Como cada verano, antes de vacaciones, intento hacer retrospectiva. Este año, según mis cuentas (mentira, lo he mirado en la facturación), son casi 150 perros y familias que han trabajado conmigo desde enero de 2024. Estoy orgulloso de lo que todos ellos y ellas han conseguido y de poder haber sido parte de esas terapias, de modificación de conducta, de acompañamiento y pautas educativas.
Como suele decirse, este año, también he mordido más de lo que podía tragar, y a mediados de abril empezaba a resentirme de ello (cuidaos para cuidar, host**), así que he llegado al verano muy cansado, con algún aprendizaje extra y el firme propósito de pensar de un modo más realista (es un eufemismo: de pensar más en mí, quiero decir).
Las redes, cansan
Parte de este cansancio, lo asocio a redes. Nada nuevo aquí: del boca a boca, pasamos a Internet, de ahí a mirar reseñas en Google, al contenido promocional, a las redes… Y ahora cada vez hay menos alcance, porque el pastel se reparte entre más, y más, y más.
Y los peces gordos se comen a los chicos.
Es la pescadilla (va de peces, la cosa) que se muerde la cola.
No es raro ver a muchos compañeros lanzarse de cabeza ante esta digitalización forzosa, y también a otros que la rehúyen, e incluso se exponen cada vez menos.
En mi área, somos educadores caninos, etólogos, psicólogos, por lo que, en teoría, deberíamos saber cómo funcionan los procesos de aprendizaje y los programas de reforzamiento.
Aprender a desilusionarse
Quizá por esto (muchos) estamos perdiendo la ilusión por las redes.
Ya sabíamos que el reforzamiento continuo no iba a durar siempre, pero están jugando demasiado rápido con nuestra ilusión.
Lo diré de otro modo: están aumentando mucho el tiempo de entrega del refuerzo a intervalo variable y también (cagándose en) el valor del reforzador.
Nos hemos dado cuenta de que esa baraja está (muy) trucada.
Nos dan cada vez menos por emitir conductas más exigentes.
El punto de ruptura… de esta asociación tóxica
Pero eso no tiene tanta importancia para los jefazos de estas redes, pueden permitirse que los mindundis lleguemos a un punto de ruptura. ¿Qué más da? Habrá más mindundis, o cambiarán el algoritmo y los refuerzos que se asignan. Tienen la sartén por el mango. Pueden freír a unos cuantos pescaditos, de vez en cuando. (Los pescaditos somos nosotros, por cierto.)
Las redes han sido como el trocito de queso para atrapar ratones (ahora, somos ratones), al principio, la exposición nos dio “curro” a todos (el queso), pero cada vez hay que ir más lejos a por el queso, y las raciones han empezado a ser una p*** mierda, por lo que, mucha gente está empezando a decir: “Que vaya Rita.”
Y hay un punto importante aquí. ¿Cuánta gente confundió un reforzador con otro? Aquí, el uso personal de las redes sociales y los aprendizajes previos tuvieron mucho que ver: no te flageles.
La peña iba buscando pasta, y consiguió alcance.
Es una buena jugada (spoiler: nos la metieron doblada), porque el valor del refuerzo es menor, pero la entrega era mucho más constante… Yo prefiero pasta, que es un reforzador generalizado, pero me dan atención a porrillo, y, ¡bueno!, ya me mola, sobre todo, si me convences de que, aunque tarde (con demora), me van a caer billetes en algún momento. ¡Y en algún momento caían!
Crimen perfecto, ¿lo ves? Qué cabr*******.
Claro, la alternativa es compleja también, porque una amplia mayoría lo ha invertido todo ahí. Aquellos que no, lo tenemos un poco mejor, pero tampoco mucho (no te vengas arriba). Toca descansar y recargar pilas, pero quizá entre cervecillas podemos darle un par de vueltas a La Fábula del Intervalo Variable, y la madre que los parió.
Estar en redes, quizá hay que estar, pero el cómo es un gran campo de batalla. A nivel de curro, y también en lo personal. Carol Hanish dijo: "Lo personal es político", y luego el feminismo de la tercera y cuarta ola, lo ha ido repitiendo y reformulando.
Aquí también aplica, no tengo dudas.
Quizá la lucha tome forma de resistencia pasiva.
Está por ver.
En este parón veraniego, aprovecho también para recordarte que:
Te agradezco mucho la preocupación por mi familia humana y canina, y todo lo que os habéis volcado con mi situación con Argos, cuando se puso enfermo
Tengo un curso gratuito de paseos, que le ha gustado a mucha gente
Lancé el curso de conductas reactivas en perros, en Udemy (estos días, estoy editando los últimos vídeos con ejercicios prácticos)
El canal de YouTube ha ido creciendo bastante, aunque últimamente no he podido dedicarle tanto tiempo como me hubiera gustado
Escribía el otro día sobre dog-friendly y pet-friendly, y el problema del concepto
En los próximos meses, mis servicios como educador canino se reducirán, por compromisos personales (estudios) y profesionales, por lo que si estabas pensando en trabajar conmigo, escríbeme cuanto antes. ;-)